Es un hecho conocido y admitido por los poderes públicos que el acuerdo de equiparación salarial, firmado entre el Ministerio del Interior y los sindicatos de la Policía Nacional y las asociaciones profesionales de la Guardia Civil, publicado en el BOE de 20 de marzo de 2018, recoge un proceso de equiparación gradual de las condiciones económicas de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado con los cuerpos policiales autonómicos, estableciéndose para ello, un escenario de tres ejercicios 2018, 2019 y 2020, con unas cantidades asignadas a cada uno de ellos, y de las que ya se han hecho efectivas las correspondientes a los dos primeros ejercicios, con una aplicación, prácticamente de forma lineal.
Acuerdo que establece diez cláusulas mediante las cuales se desarrollará el mencionado proceso de equiparación que, según lo pactado, ha de ser total y absoluto, además de contribuir a impulsar la modernización y la mejora de las condiciones de trabajo de los funcionarios de la Guardia Civil y de la Policía Nacional, es decir, para que la equiparación sea total y absoluta. Al objeto de que dicho acuerdo oficial, pueda llegar a buen fin, es evidente la necesidad de que, desde la Dirección General, se den los pasos necesarios que faciliten y garanticen la puesta en marcha del mismo.
Por todo ello, desde AUGC se ha elaborado un escrito que puede ser respaldado por todos sus afiliados, para que se designen los puestos de trabajo en el catálogo de puesto de trabajo, para la consiguiente publicación de vacantes, para personal en Reserva no ocupada y dar, por tanto, cumplimiento a la cláusula tercera del Acuerdo. Se inicien los grupos de trabajo con participación de las asociaciones profesionales, para regular reglamentariamente los incentivos al rendimiento del personal de la Guardia Civil, bajo los criterios de participación, simplificación y transparencia, norma en la que habrán de contemplarse la compensación de los sobreesfuerzos realizados por los y las guardias civiles, especialmente los derivados de la superación de jornada, y de las horas trabajadas en horario nocturno, festivo y de especial significación.
Se pide también que se actualice, bajo los mismos criterios, también la Orden General número 11, de 2014, por la que se determinan la jornada y horarios del personal de la Guardia Civil, a fin de garantizar un jornada laboral que permita de forma efectiva la conciliación de la vida familiar y laboral, con el establecimiento de turnos de servicios, y que proceda a igualar el número de horas de servicio prestadas anualmente, con las que realizan los integrantes de la Policía Nacional, ya que en el caso de los guardias civiles esta cantidad es bastante mayor, de tal modo que, difícilmente se puede hablar de equiparación, cuando uno de los dos cuerpos ha de trabajar más horas.
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