El pasado viernes comenzó el rumor entre los guardias civiles que se declaraba en ruinas el acuartelamiento de Cartagena y que este se demolería y reconstruiría en la misma parcela. Este es el final de una crónica anunciada, puesto que desde el 2016 el cuartel ya presentaba signos y síntomas de deterioro y así lo hemos denunciado en numerosas ocasiones por caídas de cornisas, apuntalamiento de voladizos, cascotes de balcones, etc.
El Ministerio del Interior como casi siempre, se ha mostrado extremadamente lento. Primero se negaban estas deficiencias para posteriormente realizar diversos proyectos de construcción de un nuevo acuartelamiento que nunca vieron la luz. El último y más sangrante el anuncio en junio de 2021 de la construcción únicamente de un nuevo edificio de oficinas olvidando las viviendas de los guardias civiles, que oficialmente se comunicó al Ayuntamiento de Cartagena, pero nunca se doto presupuestariamente para su construcción.
Finalmente ha ocurrido lo que cabía esperar y la inspección del cuartel por las últimas inundaciones en Cartagena en mayo de este año (también del cuartel de la Guardia Civil) arrojo problemas estructurales y tras la realización de catas en el forjado, principalmente de las cubiertas de los edificios, se concluye que el estado de las mismas supone un peligro para las personas que habitan el acuartelamiento y trabajan en sus dependencias.
El lunes, mandos de la 5ª Zona de la Guardia Civil de Murcia convocaron a las familias que ocupan 86 viviendas en el cuartel de Cartagena para informarles de la situación y principalmente para comunicarles que deben desalojar las viviendas de modo inminente. Así mismo ayer el Coronel de la Guardia Civil ha explicado la misma situación a los representantes de las diferentes Asociaciones Profesionales de Guardias Civiles haciendo hincapié nuevamente en el desalojo inminente y que se están comenzando gestiones con el Ayuntamiento que todavía no han obtenido resultados.
Lamentablemente nos han comunicado los problemas, pero no las soluciones y simplemente se han comprometido a realizar gestiones, pero sin garantizar resultado alguno, al tiempo que comunican que la Guardia Civil solamente cuenta con 14 viviendas oficiales en los diferentes acuartelamientos en un radio de 50 km de Cartagena.
AUGC ha insistido en buscar soluciones definitivas y urgentes para garantizar el realojamiento de aquellas familias que no tengan otra posibilidad habitacional y que se encuentran de repente en la calle sin vivienda alguna donde trasladarse. Además, hemos solicitado que sea la Administración quien se haga cargo del coste y la gestión de una empresa de mudanzas de carácter voluntario y que se haga cargo de un desalojo ordenado y planificado y no caótico con 86 mudanzas casi al mismo tiempo.
AUGC se ha entrevistado con numerosos afectados que nos explican que no tienen modo alguno de alquilar viviendas en la comarca de Cartagena y que resulta imposible contratar una empresa de mudanzas en estas fechas. El sentimiento de los afectados es desalojar cuanto antes, perdiendo lo invertido en reformas de las viviendas (que corren de cargo de los guardias civiles) pero les resulta imposible si no se toman soluciones urgentes. Todo ello está pasando factura a nuestros compañeros y a sus familias que no saben cuándo podrán desalojar, donde podrán residir e incluso cual será el colegio de sus hijos creando una incertidumbre y un miedo a que pueda ocurrir algún desprendimiento de cubiertas, cornisas o cualquier otra estructura.
Esperamos que las gestiones que nos comunican están en marcha con el Ayuntamiento de Cartagena, la Comunidad Autónoma y el SAREB arrojen resultados cuanto antes, y con ello facilitar y acelerar el desalojo que de otro modo es bastante complejo.
Es un drama humano y por ello apelamos a la Administración, lógicamente al Ministerio del Interior y la Dirección General de la Guardia Civil y al Ayuntamiento, Comunidad Autónoma y SAREB para ver si la próxima semana tenemos soluciones para los guardias civiles y sus familias, es el momento de la solidaridad y demostrar que la Guardia Civil es una de las Instituciones más valoradas no es simplemente un titular sino un “sentimiento verdadero”.
Desde luego AUGC estará siempre del lado de las 86 familias que residen en el cuartel de Cartagena y de las decenas de guardias civiles que trabajan a diario en su interior, que también corren peligro.