En la Comandancia de Huelva no está garantizado el servicio ni la seguridad por la falta de Guardias Civiles

Los agentes tienen que decidir si intervenir dejando desprotegido el acuartelamiento o pedir la actuación a otras Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Tampoco hay directrices claras y el plan de seguridad no se adapta a las circunstancias actuales

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Es urgente aumentar la plantilla, anunciar vacantes y sobre todo reorganizar a las Unidades.

No es la primera vez que la delegación de Huelva de la Asociación Unificada de Guardias Civiles denuncia la falta de personal dedicado a la vigilancia y seguridad de la Comandancia. Son numerosos los escritos remitidos a los responsables de la misma porque ni tan siquiera está garantizado el servicio con la escasa plantilla actual.

La situación es tan desastrosa que a veces se debe recurrir a los Guardias Civiles que están destinados en la prisión o en el puerto de la provincia. Cuando hay que custodiar a los detenidos queda patente que falta personal, también cuando alguno se siente enfermo o indispuesto. No se debe recurrir continuamente a otras Unidades, tal y como se lleva haciendo. Continuamente se están mermando efectivos que, del mismo modo, son necesarios en sus respectivos puestos. Es urgente aumentar la plantilla, anunciar vacantes y sobre todo reorganizar a las Unidades.

Hay varios Guardias Civiles con turno de mañana y pocos en horario de tarde y de noche. Además, los agentes se ven muchas veces en la tesitura de dejar la seguridad de la Comandancia e intervenir o llamar a otros miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para que intervengan, con las responsabilidades que esto conlleva. Hay un exceso de requerimientos y acciones para una cantidad tan insuficiente de Guardias Civiles. Por si fuera poco, no hay unas directrices claras de actuación ni se ha adaptado el Plan de Seguridad de la Comandancia de Huelva.

Tanto la Asociación Unificada de Guardias Civiles como varios compañeros del Cuerpo han presentado solicitudes para reclamar el cumplimiento del Plan de Seguridad y la evaluación de riesgos laborales, pero no se tiene constancia de que se haya tomado medidas al respecto. Hace poco un ciudadano sufrió una agresión con arma blanca a escasos metros de la puerta de la Comandancia y es necesaria la renovación del citado Plan y su adecuación a los tiempos actuales. Dados los medios existentes, se vuelve complejo seguirlo incluso cuando hay que hacer frente a grandes concentraciones de gente.

Como indicamos anteriormente, mientras no se reorganicen a las Unidades, se aumente la plantilla y se anuncien vacantes, seguiremos sin poder garantizar el servicio y la seguridad. Los problemas sólo pueden ir en aumento. Hay Guardias Civiles que están dedicados a labores que no se ciñen a la prevención de la delincuencia debido a la falta de personal. Todo esto se debe que la actual distribución de la Guardia Civil esta anticuada y no se ha adaptado a los medios de transporte ni a las comunicaciones del siglo XXI. Las autoridades políticas deben tomar las decisiones adecuadas o seguiremos así y peor.