El derrumbe de un edificio de apartamentos hace escasamente un mes colapsó parcialmente la popular localidad turística de Los Cristianos (Tenerife), dejando el fatal balance de varios muertos. Los cuatro edificios colindantes al afectado por el derrumbe, tuvieron que ser desalojados ante la gravedad del siniestro, como medida preventiva. Y no cabe duda que la Guardia Civil siempre acude. Personal del Greim de Tenerife cumpliendo órdenes, se desplazó a la zona para ayudar en las labores de búsqueda y rescate en la zona del colapso.
Los Guardias Civiles de Rescate en Montaña, GREIM, son personas abnegadas, entregadas a su profesión y que nunca dirían ni dirán un “no” por respuesta ante una petición de auxilio o una orden. Si bien es de justicia poner sobre el contexto del debate y la crítica constructiva las condiciones en las que tuvieron que trabajar, y recordar al mando que no todo vale en las condiciones laborales en las que se exponen a una lesión o pierden potencial ante un rescate en montaña, que es para lo que estos profesionales tienen que estar disponibles.
Para trabajar en una zona de estructuras colapsadas hay que llevar un equipo de protección individual mínimo, para garantizar la seguridad de los intervinientes, equipo que actualmente no es proporcionado por la Jefatura de montaña.
En la zona existía gran número de personal para realizar labores de búsqueda en estructuras colapsadas, por lo que las labores del GREIM no eran de urgente necesidad
Un equipo de protección individual en estructuras colapsadas ha de reunir unos requisitos mínimos que los componentes del GREIM de Tenerife en estos momentos carece.
Casco: de protección integral, incluida nuca, para evitar lesiones punzantes penetrantes, los cascos de escalada son ventilados con apreturas en los laterales en ángulos elevados, los cuales permiten la entrada fácilmente de cualquier objeto punzante, la composición de estos cascos es de corcho expandido, recubierto por una fina capa exterior de policarbonato, cascos homologados para las actividades en montaña, no para un EPI de estructuras colapsadas.
Gafas: Tienen que cubrir completamente los ojos, deberán ser resistentes a las rayaduras y a los impactos de pequeñas partículas a alta velocidad, no valen las de sol.
Ropa de protección: debe ser tipo mono o dos piezas (chaqueta y pantalón) en un color visible y con elementos reflectantes. Han de estar confeccionadas en tela resistente y deben cubrir perfectamente las extremidades, tanto piernas como brazos.No se puede ir de manga corta, la ropa de montaña que es ligera y transpirable no es apta para estas funciones.
Coderas y rodilleras: elementos fundamentales, estas son las partes del cuerpo más expuestas y sufridas al movernos por escombreras y delicadas en caso de caída.
Guantes: Necesitan protección anticorte, antiabrasiónlos de montaña Peltz no están homologados para EPI en estructuras colapsadas.
Botas de seguridad: Con una protección para los golpes, en maléolos, antipinchazos en planta de los pies, aplastamiento en la puntera, suela especial antideslizante.
Aunque otros bomberos no lleven el EPI, no es competencia nuestra valorar por qu é no lo llevan, en nuestro caso, los GC del GREIM están muy expuestos antes cualquier incidencia dentro de la zona del colapso por no tener de un equipo de protección individual.
Por el capricho de un Jefe este no puede disponer de los guardias como si les pudiera ordenar cualquier cosa, sin pensar en su seguridad.
Hay que incidir en las buenas prácticas en la prevención de riesgos laborales y estos ejemplos no deben producirse más.
Sin duda alguna la Guardia Civil siempre estará en situaciones donde se le requiera, allí donde las catástrofes hacen mella y así lo ha demostrado siempre pero estas situaciones no dejan de ser puntuales, sin embargo hay especialidades en la Guardia Civil donde esta particularidad se convierte en lo cotidiano de su trabajo y donde su seguridad siempre cuenta o al menos así debería ser.
Este ejemplo que trasladamos es a nuestro juicio una exposición innecesaria de unos componentes que carentes del material necesario se les ordena la participación en una misión que ya estaba plenamente cubierta por profesionales con esa función específica. Este uso del personal del GREIM en el lamentable accidente de Los Cristianos parece regirse más bien por otros patrones que responde más a intereses de competencias entre administraciones que a la verdadera necesidad de su uso.
Estas especialidades que todos los días están expuestas a riesgos de alto nivel deben tener sin duda la prevención como principal estandarte de su formación así como un equipamiento adecuado a la función desarrollada.
Es la DGGC en primera instancia la que debe velar por el cumplimiento de las medidas de seguridad en el trabajo y la que debe averiguar los motivos del uso de estas Unidades en misiones que no les son propias.
