Como ya anunció la pasada semana la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC), muchos guardias civiles están comprobando que sus nóminas de enero han sufrido un drástico recorte. La culpa la tiene un grave error administrativo cometido el pasado año en la Dirección General, por el que se ha computado mal la productividad. Esto supone que muchos trabajadores cobren en enero hasta 400 euros menos de lo habitual.
De hecho, al parecer la orden dada es que ningún guardia civil perciba menos de mil euros este mes. Con ello resulta fácil deducir la importancia de las reducciones.
Pero, además, por si esta situación no revistiera ya especial gravedad, ya que incide directamente en el presupuesto diario de las familias para llegar a fin de mes, la Dirección General ha vuelto a ignorar a las asociaciones profesionales a la hora de abordar el problema.
Para AUGC, este desastre administrativo vuelve a poner en evidencia el despropósito que supone el actual reparto de la Productividad, pues ni ellos mismos se aclaran, además de que su adjudicación sea realizada de manera injusta, favoreciendo siempre a los altos mandos y dejando las migajas para los trabajadores, pero es que también se ejecuta de forma chapucera, demostrando la falta de celo de la Administración en la gestión de los recursos y las nóminas de sus funcionarios. Recordemos que este caso afecta a la escala de Cabos y Guardias, mayoritariamente, así como a parde de Suboficiales, pues afecta en su mayoría a quienes han prestado servicio en nocturnos, fines de semana y festivos.
Por ello, animamos a todos los afiliados a respaldar y enviar al Consejo la propuesta que hemos subido a través de augc.org y de nuestra APP para móviles. A través de dicha propuesta se solicita a la Dirección General que se proceda a convocar los grupos de trabajo necesarios, a fin de proceder a modificar la actual OG sobre incentivos al rendimiento, con el fin de retribuir los conceptos legales y reglamentarios que se anudan a tal concepto retributivo, y que no son otros que el especial rendimiento, la actividad extraordinaria y el interés o iniciativa con que el funcionario desempeñe su trabajo.
Desde AUGC confiamos en que este nuevo desprecio hacia los guardias civiles no constituya el primer síntoma de lo que nos espera con la nueva Dirección General, y que la solución de esta deficiencia en las nóminas no sea hacer aún más empinada la temida cuesta de enero para los trabajadores y sus familias.