Con la llegada del periodo estival, numerosos ayuntamientos de toda España programan sus fiestas patronales, incluyendo en sus programas encierros taurinos al aire libre, donde las y los guardias civiles de toda España deben garantizar el cumplimiento de la normativa y la seguridad ciudadana.
Pero estos eventos, en la mayoría de las ocasiones, no reúnen las condiciones de seguridad necesarias, ni tampoco garantizan los derechos a la prevención y protección laboral de los guardias civiles. La Guardia Civil debe ser garante, no solo de la seguridad del ciudadano, si no de la propia seguridad laboral de los miles de guardias civiles que prestan estos servicios.
No es la primera vez que somos testigos de toros que embisten vehículos de la Guardia Civil, con los agentes dentro, debido a la falta de medidas de seguridad programadas por los ayuntamientos, o incumplidas por los numerosos asistentes a estos eventos, los cuales incluso se llegan a enfrentar a los agentes que les proponen para sanción por incumplir la normativa vigente.
Situaciones como la de Galapagar, en el año 2019, donde los compañeros fueron embestidos por un toro de lidia, o las que se suceden año tras año en la Alcarria (Guadalajara), donde vehículos sin autorización para el festejo, muchos de ellos sin seguro ni documentación y en estado de ebriedad, ponen en peligro el normal desarrollo de los festejos y hacen que los guardias civiles se jueguen su propia vida e integridad física, no deben permitirse bajo ningún concepto.
Desde AUGC reclamamos a la Guardia Civil que garantice las medidas de seguridad y prevención de riesgos laborales de los agentes a los cuales se les nombra este tipo de servicios y exija a los Ayuntamientos el mismo nivel de protección de estos compañeros y compañeras que se juegan su integridad física en estos eventos, con dispositivos dimensionados por todas las Instituciones.
