AUGC denunciaba la semana pasada la filtración de preguntas en uno de los exámenes para el ascenso al empleo de Cabo, cuestión que llevó a la Dirección General de la Guardia Civil a tomar medidas de manera chapucera reconociendo así esta grave situación. Desde luego, los guardias civiles que con tanto esfuerzo y horas de estudio han finalizado su plan de formación no son quienes deben asumir las consecuencias y verse perjudicados.
Para AUGC, la Jefatura de Enseñanza debe tomar las medidas necesarias para que no se repitan las pruebas, pues los alumnos del curso a Cabo no son quienes han originado esta situación. Por este motivo, una de las medidas que se deben adoptar es la anulación de las preguntas filtradas y se realice la nota media para la calificación final con el resto de preguntas.
Pero en ningún caso, los alumnos del 106 curso de capacitación para el ascenso al empleo de Cabo deberían volver a examinarse bajo las condiciones que ahora ha impuesto la Jefatura de Enseñanza al dictar instrucciones para repetir el exámen de manera virtual, el próximo jueves día, pues esta no es una forma transparente ni objetiva. Más bien es la manera de dar carpetazo a un asunto que ha creado un profundo malestar entre los guardias civiles que han decidido promocionar profesionalmente a costa de nuevos traslados, horas de estar lejos de sus familias y amigos, y que ahora se ven nuevamente perjudicados.
La directora de la Guardia Civil debe tomar decisiones y asumir sus responsabilidades ante este escándalo.
Y mientras las decisiones injustas se siguen tomando desde la DGGC, AUGC se pregunta ¿Dónde está la directora de la Guardia Civil? ¿Por qué no ha ordenado la apertura de una información reservada? ¿Por qué no se busca al responsable o responsables de esta filtración?
Este escándalo no puede taparse sin buscar una solución justa para los afectados, así como la adopción de medidas que, para transparencia de la institución, arrojen luz a esta nueva filtración de exámenes oficiales.
Esta inacción por parte de Gámez, se suma a la nefasta gestión que está realizando desde que llegara a la Guardia Civil. Sin diálogo, sin atender las legítimas reivindicaciones de los guardias civiles para la modernización del Cuerpo, observamos como cuando llega la hora de asumir sus responsabilidades prefiere mirar para otro lado.
AUGC seguirá trabajando para que los alumnos del 106 curso de Cabo no tengan que pagar las consecuencias, así como para que se establezcan mecanismos que aporten mayor transparencia en el funcionamiento interno del Cuerpo.