La llegada de algo tan importante para la salud de los trabajadores, está suponiendo un incumplimiento reiterado en las unidades de la normativa en materia de protección de datos, suponiendo infracciones de elevada gravedad, lo que evidencia la absoluta falta de formación que existe en la Guardia Civil sobre ésta materia o, lo que sería más grave, el conocimiento y desprecio absoluto por su cumplimiento.
Sin embargo es la propia Guardia Civil la que comunica y reconoce que se están recopilando datos personales, y datos especialmente protegidos (datos sobre la salud de las personas) de los agentes.
A los afectados en ningún momento se les informan de datos tan importantes como:
- Datos de contacto del responsable. Identidad y datos del representante (si existiese). Datos de contacto del Delegado de Protección de Datos (si existiese).
- Descripción ampliada de los fines del tratamiento. Plazos o criterios de conservación de los datos. Decisiones automatizadas, perfiles y lógica aplicada.
- Detalle de la base jurídica del tratamiento, en los casos de obligación legal, interés público o interés legítimo. Obligación o no de facilitar datos y consecuencias de no hacerlo.
- Destinatarios o categorías de destinatarios. Decisiones de adecuación, garantías, normas corporativas vinculantes o situaciones específicas aplicables.
- Como ejercer los derechos de acceso, rectificación, supre y portabilidad de los datos, y la limitación u oposición a su tratamiento. Derecho a retirar el consentimiento prestado. Derecho a reclamar ante la Autoridad de Control.
Por otro lado, aunque se indica que la documentación se remitirá en sobre cerrado, no es menos cierto que el acceso a dicha documentación (renuncia e informes médicos), se realizará por personal ajeno al SPRLGC o servicio médico, lo que origina que personal no necesario recabe y tenga acceso a esos datos.
Finalmente, la recopilación que se está realizando, supone recabar más datos de los realmente necesarios para el fin que se persigue, y no estamos hablando de cualquier dato, sino que hablamos de datos sobre la salud de las personas (especialmente protegidos).
Los guardias civiles, al igual que el resto de ciudadanos, tienen la libertad de decidir si se vacunan o no se vacunan (decisión personal).
Según ha informado el Gobierno, y así ha salido en los medios, los fines para los que se solicitan datos sobre el motivo de no desear vacunarse, se limita a datos estadísticos para futuros estudios.
Por ello, carece de justificación legal y necesidad alguna, ya no sólo tener que informar de la enfermedad concreta que sufre una persona, por la que no desea vacunarse sino tener que justificarla con documentación médica como se les está exigiendo.
Todo ello, nos lleva a pensar, que la DGGC está recabando datos de salud de las personas sin amparo legal alguno y sobrepasando los fines para los que se está recabando la información de la voluntariedad o no de recibir la vacuna.
Desde AUGC consideramos que debe ser suficiente que el agente diga que no desea vacunarse por sufrir una enfermedad incompatible con la vacuna, pero el tener que justificarlo con documentación médica sobrepasaría la legalidad de recopilación de datos, ya que la vacuna es voluntaria no se debería de justificar nada.
Ante estas consideraciones expuestas solicitamos al Delegado de protección de Datos de la Guardia Civil que comunique a la Dirección General la necesidad del cese de éstas prácticas, garantizando que se tomen las medidas de seguridad necesarias para evitar la inclusión en las bases de datos de la Guardia Civil y cualquier forma de archivo, de los datos de salud procedentes del proceso de vacunación, bloqueando e impidiendo el acceso a los mismos y procediendo a su eliminación ya que de continuarse con éstas prácticas, AUGC elevará denuncia ante la Agencia de Protección de Datos por vulneración de la legalidad.
