AUGC reclama un refuerzo estable y real de los medios humanos y técnicos en Ceuta y Melilla para prevenir situaciones migratorias extremas

Debemos mostrar, así mismo, todo nuestro apoyo a los compañeros que están trabajando en estos momentos en un escenario muy complicado.

por Redacción AUGC

Un guardia civil vigila a dos jóvenes inmigrantes llegados desde Marruecos.
Un guardia civil vigila a dos jóvenes inmigrantes llegados desde Marruecos.

La situación que comenzó a producirse ayer en Ceuta, con la llegada masiva de personas procedentes de la frontera con Marruecos, vuelve a recordarnos las viejas carencias largamente denunciadas por AUGC: la falta de medios humanos y materiales de la Guardia Civil, tanto en Ceuta como en Melilla, para poder ofrecer una respuesta adecuada y proporcionada a crisis migratorias como la que está aconteciendo en las últimas horas.

Es cierto que la inmediatez de los hechos que comenzaron ayer lunes y que hoy todavía continúan exige una respuesta extraordinaria, con el envío de refuerzos y la presencia del Ejército, cuya labor apoyamos y agradecemos enormemente desde AUGC. Pero estos recursos de emergencia no deben hacernos olvidar la precariedad permanente bajo la que trabajan de manera habitual los guardias civiles que vigilan la frontera de estas ciudades.

Porque faltan agentes y medios técnicos, pero también protocolos claros de actuación. Todo ello con el fin de que los guardias civiles no deban actuar como meros escudos humanos ante las avalanchas de personas que tratan de acceder de forma desesperada desde el otro lado de la frontera.

 

 

Este refuerzo de medios y establecimiento de protocolos constituye la única vía de preservar de manera estable la seguridad personal, tanto de los agentes como de los migrantes.

Y es que, una vez pase la avalancha de esta semana, desde AUGC nos tememos que de nuevo se quedaran solos los claramente insuficientes componentes de la Guardia Civil destinados tanto en Ceuta como en Melilla, y con ello volverán a quedar expuestos a situaciones como la que ahora vivimos.

Por ello, todo lo que no sea reestructurar totalmente estos equipos supondrá volver a estar expuestos de manera continua, y deber así a recurrir a soluciones de emergencia como la de hoy.

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