El día dos de marzo de 2017, uno de los seguidores ultras más reconocidos del entorno futbolístico recibió el alto de los agentes de tráfico. M. H. P. había infringido las normas de circulación cuando conducía por la A-49 en sentido Huelva. Haciendo caso omiso a las órdenes de la autoridad, emprendió la huida imposibilitando la identificación y la imposición de la denuncia correspondiente. Recorrió a gran velocidad la autopista, realizó adelantamientos por izquierda y derecha, obligó a los usuarios a modificar la trayectoria para evitar accidentes y finalmente se adentró en el municipio sevillano de Benacazón, donde además circuló en sentido opuesto al de la marcha.
Los agentes de tráfico alertaron al resto de patrullas de la zona y se unieron a su detención. M. H. P. también demostró en vías del municipio un total desprecio por la vida del resto de usuarios, pero tuvo que detenerse: Un coche situado en una calle de sentido único obstaculizaba su trayectoria. El autor de los hechos narrados a continuación estuvo seguido en todo momento por el Guardia Civil de Tráfico al que atropelló. El agente, que vio cómo el acusado frenaba el vehículo ante la situación, detuvo su motocicleta. Entonces, al verse acorralado y sin tiempo de reacción, M. H. P. dio súbitamente marcha atrás. En todo momento era consciente de que detrás se encontraba el agente de Tráfico. Pese a ello, lo arrastró durante más de ocho metros.
Ante la gravedad de los hechos, nuestro compañero y afiliado tuvo que hacer uso de su arma reglamentaria. Su vida estaba en peligro. Efectuó un disparo intimidatorio, que llegó a impactar en el parabrisas delantero del vehículo, y el agresor se dio a la fuga alejándose del lugar. Posteriormente, el vehículo fue localizado totalmente calcinado en un olivar cercano.
Como consecuencia de lo ocurrido, en enero de 2018 la Asociación Unificada de Guardias Civiles de la Delegación de Sevilla solicitó a la Sección Tercera de la Audiencia provincial que se imputara un delito de homicidio en grado de tentativa. El acusado era totalmente consciente de la presencia del motorista de Tráfico y el atropello intencionado provocó al agente lesiones en un hombro que todavía no han sido curadas ni después de varias intervenciones quirúrgicas. Sin embargo, la autoridad judicial provincial desestimó el recurso.
Hoy, después de alguna suspensión previa, el próximo viernes día 22 de abril se celebrará la vista oral en el Juzgado de lo Penal nº 9 de Sevilla. La acusación particular estará ejercida por el letrado de AUGC-Sevilla D. José Luis Ganfornina y solicitaremos un aumento de la pena de prisión hasta los ocho años y el incremento de la indemnización por las lesiones ocasionadas al Guardia Civil. Esta última cuestión está pendiente de valoración dadas las recientes intervenciones quirúrgicas
Por su parte, el Fiscal pide para el acusado una pena de cinco años y medio de prisión por cinco delitos. No se debe permitir que salga barato poner en riesgo la vida de un compañero. M. H. V. ya es conocido por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y por las autoridades judiciales. Cuenta con más de 30 detenciones por delitos de narcotráfico, extorsión, secuestros, lesiones, y es protagonista varios altercados y agresiones. Actualmente se encuentra en prisión cumpliendo alguna de las condenas pendientes y por ello se solicitó la celebración del juicio oral antes de su puesta en libertad.
Los servicios jurídicos harán lo posible para que caiga todo el peso de la ley sobre quien atenta contra un Guardia Civil en el ejercicio de sus funciones. El Ministerio del Interior dispone de nuestra solicitud para que se proceda a la reforma del Código Penal para que haya un incremento de las penas por atentar contra los agentes de la autoridad.
