El Alto Tribunal ha estimado el recurso contencioso-administrativo que interpusimos en noviembre de 2021 contra el proyecto de unificación de las Comandancias de Oviedo y Gijón. El Consejo de Ministros aprobó este precepto en agosto del pasado año sin escuchar al Consejo de la Guardia Civil a pesar de que la decisión afectaba a aspectos sociales, profesionales o económicos de los agentes del Cuerpo. Ante esta falta de consultas previas, iniciamos las acciones jurídicas que ha estimado la Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Supremo y las gestiones empezarán de nuevo. Esta vez la Administración tendrá que escuchar a las Asociaciones Representativas de los Guardias Civiles.
El fallo dictamina que es “innegable” la omisión del trámite preceptivo y que la unificación de las Comandancias de Oviedo y Gijón “puede afectar -entre otras cosas- al número de efectivos y a la distribución del trabajo”. Al ser una cuestión que afecta al ámbito profesional, el Consejo de Ministros tuvo que haber escuchado al Consejo de la Guardia Civil antes de intentar aglutinar en Oviedo a ambas Comandancias bajo la denominación de “Zona de la Guardia Civil del Principado de Asturias”.
Ante estos fundamentos, el argumento del Abogado del Estado es “insatisfactorio”, tal y como lo califica el Tribunal Supremo: “Que los derechos y deberes expresamente contemplados en el Título V de la Ley Orgánica 11/2007 hagan referencia a la profesión, no impide que puede haber otros aspectos profesionales”, indica la sentencia del órgano jurídico.
Por todo ello, la Administración anula el acuerdo del Consejo de Ministros en el que se pretendía unificar las Comandancias de Oviedo y Gijón y condena en costas a la Administración, hasta un máximo de 2.000 euros por todos los conceptos. Lamentamos una vez más la pretensión de dejar al margen a las Asociaciones Profesionales, de no escuchar nuestras voces ni reivindicaciones. Una vez más, la Justicia nos da la razón.
Por otro lado, no cesaremos en denunciar la incesante creación de todo tipo de unidades fantasmas (Lobos, Rocas, Arrobas o Viogen, entre otras) sin contar con los Representantes de los Guardias Civiles y sin la implementación de un nuevo modelo policial que renueve al actual. Algunas de estas unidades fantasmas –por no decir todas- se crean sin personal suficiente con la simpleza de que, publicitando la creación de las mismas, la sociedad crea que la Guardia Civil potencia la vigilancia de los delitos asociados a ellas. Nada más lejos de la realidad: no dan abasto. La Asociación Unificada de Guardias Civiles defiende la creación de esas mismas unidades con sus correspondientes catálogos de puestos de trabajo. Son unidades necesarias pero que no deben ser nutridas por los miembros de Seguridad Ciudadana porque entonces se reducen las capacidades de sus unidades. La Directora General, María Gámez, sigue perpetuando este torticero método de creación y mantenimiento de unidades fantasmas, desabastece de guardias civiles los puestos de Seguridad Ciudadana.
