Desde AUGC, el coordinador nacional de los Servicios de Protección y Seguridad ha remitido dos escritos al director del Centro Penitenciario Alicante II, ubicado en Villena, exponiéndole que varios internos clasificados en primer grado −por su peligrosidad− están siendo trasladados reiteradamente a centros hospitalarios por la ingesta de distintos objetos, como cuchillas de afeitar, pilas y piezas de mecheros.
Estos hechos se vienen repitiendo en numerosas ocasiones desde que se inició el estado de alarma, y los propios internos han comunicado a los guardias civiles encargados de su traslado que están ingiriendo dichos objetos como método de protesta y para conseguir que les saquen de la prisión, aunque sea temporalmente.
AUGC le ha expuesto al director del centro penitenciario que resulta ilógico e incomprensible que, a pesar de esos hechos, se siga permitiendo a dichos internos tener acceso a objetos que puedan utilizar para autolesionarse y obligar a su trasladado a centros hospitalarios. Sobre todo teniendo en cuenta que para trasladar a internos de ese tipo debe habilitarse un dispositivo distinto al habitual, compuesto por un número mayor de efectivos de la Guardia Civil, a lo cual debe añadirse que también deben ser custodiados permanentemente durante el tiempo que permanecen ingresados en los hospitales.
Esta situación está generando graves riesgos para la integridad física y la vida de los propios internos, pero también para la seguridad y salud de los guardias civiles y del personal sanitario, sobre todo teniendo en cuenta la actual situación generada por el virus COVID-19, a lo cual debe añadirse el riesgo de fuga que implica cualquier conducción o traslado, sobre todo tratándose de internos peligrosos y agresivos como son los clasificados en primer grado.
De hecho, en las últimas horas uno de esos internos habituales ha vuelto a ingerir objetos peligrosos y ha incendiado su celda, así como intentó sustraer los teléfonos móviles de personal sanitario en el hospital, insultando y amenazando de muerte a los agentes. La situación es ya insostenible y la dirección del centro penitenciario de Villena debe adoptar medidas contundentes con carácter urgente.
En este momento las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado necesitan dedicar el mayor potencial humano posible al fin prioritario de hacer cumplir toda la normativa, órdenes e instrucciones impartidas en relación con el estado de alarma, para lo cual incluso el personal de las unidades encargadas de la seguridad penitenciaria está desempeñando cometidos de seguridad ciudadana en numerosas localidades de todas las provincias, por lo que el número de efectivos disponible para realizar los traslados de internos es muy limitado actualmente.