Los hechos ocurrieron en la noche de este pasado domingo cuando el guardia civil de San Vicente del Raspeig fue atropellado cuando intentaba identificar al joven de 19 años que se dio a la fuga cuando los agentes requirieron que se identificara, pero al final fue detenido.
Este lamentable episodio no solo pone de manifiesto los peligros a los que se enfrentan diariamente los agentes de la Guardia Civil, sino que también refleja una situación injusta que llevamos años combatiendo. La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) ha estado abogando incansablemente para que se reconozca a los guardias civiles como profesionales de ‘grupo de riesgo’, dada la naturaleza de su trabajo y su papel esencial en los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado.
Es inaceptable que aquellos que velan por nuestra seguridad nacional se vean obligados a afrontar condiciones de jubilación precarias debido a la falta de índices correctores. Esta injusticia no tiene cabida en la seguridad pública de nuestro país. Los guardias civiles merecen una jubilación digna que refleje los riesgos significativos que asumen en el cumplimiento de su deber.
Una vez más hacemos un llamamiento urgente al Gobierno para que reconozca finalmente la función de los guardias civiles como una profesión de riesgo y tome medidas para establecer índices correctores adecuados que garanticen una jubilación digna. Esta es una cuestión que requiere, sobre todo, voluntad política y un compromiso firme con la seguridad de todos los ciudadanos.
No podemos permitir que los guardias civiles se retiren con una pensión que no refleje los peligros que enfrentan en su carrera profesional. Es hora de poner fin a esta discriminación y garantizar que aquellos que nos protegen a diario sean tratados con el respeto y la consideración que merecen.
Desde AUGC queremos mandar un mensaje de apoyo y pronta recuperación al agente.
