Ante el nuevo asalto que tuvo lugar ayer en la valla fronteriza de Melilla, y tras el que 87 migrantes subsaharianos -de los 150 que lo intentaron- consiguieron entrar en territorio español, AUGC debe expresar, en primer lugar, su apoyo a los compañeros, en especial al que resultó herido leve en un tobillo.
Asimismo, una vez más hemos de reclamar más medios técnicos, materiales y humanos para contener estos asaltos y garantizar la seguridad, tanto de los guardias civiles como de los propios migrantes. Los agentes no pueden ser los escudos humanos de estas avalanchas.
En este sentido, se hace más necesario que nunca ese refuerzo que llevamos solicitando desde hace años, tanto a través del incremento del número de efectivos en la zona como de la instalación de cámaras detectoras de movimiento de anticipación, así como la adquisición de vehículos con plataformas elevadoras que den seguridad a los agentes que necesiten subir a la valla en el caso de que se acceda a la parte alta de la misma.
Por otra parte, AUGC vuelve a insistir en la necesidad de contar con un protocolo de actuación claro e inequívoco en las fronteras con Ceuta y Melilla. Es urgente, en este sentido, que los agentes cuenten con una mayor protección jurídica en la labor diaria que realizan en los pasos fronterizos.