La aprobación se produjo con el voto a favor del Partido Popular y con el rechazo frontal de todos los grupos de la oposición, que solicitaron excluir a la Guardia Civil de la aplicación de la norma. En la misma sesión también se aprobó el proyecto de Ley por la que se modifica la Ley de la carrera militar. Con esta votación, ambos proyectos quedan definitivamente aprobados y listos para su publicación en el BOE y entrada en vigor en el momento que se establezca.
La aplicación del Código Penal Militar a los guardias civiles en su función de policías ratifica que cualquier agente pueda cumplir una condena en una prisión militar por el simple hecho de mantener una discusión con su jefe, una circunstancia que ya se ha producido este mismo año y que actualmente amenaza a varios guardias civiles más.
Con la consumación de esta remilitarización se acaba también con la Ley Orgánica 12/2007 del Régimen Disciplinario de la Guardia Civil y el artículo 7.bis de la Ley Orgánica 13/1985 del Código Penal Militar, en la que se especificaba claramente que el uso del Código Penal Militar en la Benemérita solo se ciñe a “situaciones extraordinarias” y siempre que se den las circunstancias de tiempo de guerra, estado de sitio o durante el cumplimiento de misiones de carácter militar.
Por el contrario, lejos de avanzar en la democratización de la Guardia Civil y en los derechos de sus trabajadores, el actual Gobierno del Partido Popular se ha empeñado a lo largo de los últimos cuatro años en profundizar en las medidas represoras contra los agentes y sus representantes. Con la aprobación ayer de esta Ley del Código Penal Militar se pone un tristísimo broche a este nefasto periodo para los trabajadores de la institución más valorada por los españoles
Esta Ley es, además, una más de entre las muchas razones por las que AUGC ha decidido convocar para el próximo 14 de noviembre una gran manifestación en Madrid con la que mostremos nuestro hartazgo en una histórica Marea de Tricornios.