Había una vez un Comandante de Puesto que tenía la manía de dar a conocer las previsiones de servicio para el mes siguiente de sus subordinados mediante tiras de papel individual, en donde figuraban exclusivamente los servicios del afectado en cuestión. Quizás albergara el temor de que si el resto de su personal conocía las previsiones de sus compañeros el cielo podría caerle encima, cual personaje de aldea gala. El caso es que esa costumbre le había granjeado el apodo de ‘el tirillas’ entre sus subalternos.-
Para más inri, la AUGC había expresado su queja por este tipo de comportamiento desprovisto de lógica, obteniendo la contestación esperada por parte de la Administración: “…la cuestión planteada se considera una queja relativa al servicio (…), por lo que dicha queja debe ser presentada por los
directamente afectados si así lo estiman oportuno, por conducto reglamentario, a su Jefe de Unidad y de forma individual (…) AUGC carece de legitimidad alguna, para presentar una queja relativa al servicio…”.-
Sobre lo anterior cabría realizar una reflexión a fin de aclarar ideas a los más obtusos del panorama benemérito. A saber, el artículo 36 de la ley orgánica 11/2007, sobre la finalidad de las asociaciones profesionales de guardias civiles, recoge como cuestión principal “la satisfacción de los intereses sociales, económicos y profesionales” de los asociados. O yo lo interpreto mal o la cuestión que estamos analizando tiene clara vertiente social y profesional. Siendo así, acudimos al artículo 38 de la misma norma y comprobamos que las asociaciones profesionales legalmente constituidas tienen derecho a realizar propuestas y dirigir peticiones relacionadas con sus fines a las autoridades competentes, así como representar legítimamente a sus asociados ante los órganos competentes de las Administraciones Públicas.
Por su parte, el artículo 44 de la antedicha recoge la posibilidad de presentar quejas a las autoridades competentes.-
Visto esto y haciendo caso omiso de la sabiduría popular que afirma que ‘más vale callar que con necios altercar’, invito a la AUGC (y a cualquier otra organización) a seguir defendiendo los intereses de sus socios frente a quienes se resisten a reconocer la pura realidad o la interpretan a su conveniencia.-
Pero el análisis no debe quedarse aquí sino que debemos acudir a la normativa reguladora de jornada laboral para averiguar qué hacer en casos como el indicado. La Orden General de la Guardia Civil nº 4/2010 trata en su norma décima del adelanto en las revisiones del servicio en el sentido de que serán conocidas por el personal que deba realizarlos al menos con siete días naturales de antelación al comienzo del mes planificado, sin especificar el cómo. También se dice que las previsiones mensuales podrán sufrir
alteraciones justificadas y que en tal caso las modificaciones se publicarán, para conocimiento general del personal afectado, por el mismo procedimiento por el que se dé a conocer la previsión mensual. Y aquí viene el meollo del asunto ya que, si bien la obligación de dar a conocer la previsión del servicio al personal afectado deja margen para las ‘tirillas’ individuales, la modificación de las mismas no, porque estas deben ser ‘publicadas’ por el mismo procedimiento por el que se da a conocer la previsión mensual. Dado que la acepción del verbo publicar que recoge la RAE, y que viene al caso, podría ser la de hacer notorio o patente algo que se quiere hacer llegar a noticia de todos o bien hacer patente y manifiesto al público algo, no cabe posibilidad de dar a conocer las previsiones mediante tirillas individuales toda vez que las modificaciones hacerse públicas. Por tanto al establecer la publicación de las modificaciones por el mismo método
que las previsiones, llego a la conclusión que tales previsiones no pueden ser dadas a conocer de manera
individual.-
También se puede optar por solicitar al ‘tirillas’ que sea consecuente con sus posturas y que cada que haya una modificación en las previsiones confeccione nuevas tiras para cada una de las personas que estas personas, a su vez, reúnan todas las tiras individuales en un folio mayor en donde se las previsiones de todos los miembros de la Unidad. Luego se fotocopia y se cuelga del de anuncios bajo el nombre de ‘tirillas prediction’.